En 1981, en San Francisco, Chris Gardner (Will Smith) invierte sus ahorros de toda la vida en escáneres de densidad ósea portátiles que intenta demostrar y vender a los
médicos. La inversión resulta ser un fracaso, que deja en bancarrota a la familia y, como resultado, su esposa Linda (Thandie Newton) lo deja y se muda a New York. Su hijo Christopher (Jaden Smith) se queda con su padre. Intentando vender uno de los escáneres en el centro, Chris conoce a Jay Twistle (Brian Howe), un gestor de Dean Witter y lo impresiona resolviendo el Cubo Rubik durante un corto viaje en taxi. Chris no tiene suficiente dinero para el taxi y huye hacia la estación de metro en la que apenas se escapa del conductor del taxi, pero pierde uno de sus escáneres óseos en el proceso. Esta nueva relación con Twistle le da la oportunidad de convertirse en un interno corredor de bolsa.